3- "Rast Hall"

El día 3 me levante temprano también. Mirando como amanecía y como los cuatro rascacielos se iban iluminando poco a poco vi una ardilla en el jardín de la casa, y me fije mas y vi muchas subiéndose a los árboles. Hay muchas por todo el campus. Es bonito.

Hicimos algunas gestiones mas y llego el momento de entrar en la residencia. Mi residencia se llama “Rast Hall”. Me presento en el mostrador y pienso “¿ahora que decimos Fran?”. Creo que fue fácil porque me vieron que no sabia hablar muy bien, así que me valió una vez mas con mi nombre, la sonrisa y el “yes yes”. Tira palante Fran!!! Se ofrece a acompañarme una chica rubia, Megan, que me lleva a mi room muy amablemente. Ella es “resident assistent” pero no es la mía. La mía es Cheryl, que vino después a presentarse también por si tenía alguna duda. A Megan le entendí casi todo, a Cheryl use otra vez la técnica del “yes yes”. La residencia es de pisos, es decir, que tengo mi habitación dentro de un piso que tiene un salón con una cocina y cuatro cuartos y dos baños. Asi son todas aquí. Mis compañeros o roommates son: Benoix, de origen francés, de Washington y estudia teatro; Tim, de Birmigham y de teatro también; y Rubén, de padres mexicanos aunque el es americano, estudia “estudios internacionales” algo así como empresariales. Sabe hablar perfectamente español e ingles así que me ayudo bastante al principio a comunicarme con mis roommates. Tuve mucha suerte con él. Además decir que los tres se mostraron super amables conmigo desde el primer momento. Que comiera de su frigo todo lo que quisiera, que todo era para todos, que no habría problemas… Genial!

David nos trajo unas cajas con cosas de otros españoles de otros años que nos vinieron muy bien a Juande y a mí. Perchas, mantas, sabanas, folios, sartenes, paraguas… Me pase la tarde organizando las cosas.

Mi room esta muy bien, con los muebles necesarios, no como en la de Jaén… y el cuarto de baño lo comparto con Benoix. Estaba “algo” sucio. Asi que al día siguiente por la mañana le dije que quitara sus botes que lo iba a limpiar y me dijo que no, insistió en que lo limpiaría el. La bañera estaba mas negra que el fondo de una olla., y a mi eso… me puede. Lo acaba de limpiar y me dice algo de lo que solo entiendo que ha terminado ya, y me vuelve a decir algo del floor (suelo de la bañera), que tampoco entiendo para al final decirme la palabra mágica: “permanent”. OK, ahora creo que lo he entendido… "No todo puede salir perfecto Fran".

He notado que allí donde voy les causa mucho respeto a todos el decir que eres europeo. Y cuando les dices “español de España!!!” todos sonríen. Asi que orgulloso de ser europeo y español!!! Y ya cuando dices ingeniero… les impresiona mucho. Al próximo le digo que soy el Príncipe de España!!!

Aquí me cuentan que este año esta siendo muy raro porque no hace tanto frió como suele hacer por esta época, aun así yo voy con mi abrigo, porque hace unos diez grados o así por la mañana. A veces vemos en España a los extranjeros vistiendo en nuestro invierno con pantalones cortos y camisetas cortas. Aquí soy yo el raro, voy con mi abrigo y veo que la gente lleva pantalones cortos, polos, chanclas...

Pero para ser distinto hablemos de las razas. Alguna vez hemo visto un negro en España en un autobús o algún sitio y parece “el distinto”. Yo ahora soy “el diferente”. Imaginadme en un ascensor lleno de negros. Aquí hay mayoría de negros diría yo. Si no seguro que la mitad. En mi residencia ganan los negros.

Un poco de culturilla general que no viene mal. La historia de estos dos estados: Missisipi y Alabama. Cuando la época de la colonización y la esclavitud se traían a los esclavos desde África y entraban a trabajar en los campos de América por estos dos Estados que dan al golfo de México. Por eso aquí hay muchos negros. Y por ahora me gustan, siempre están de buen rollo.

¿Habéis visto la película “Borat”? Si no la habéis visto imaginad a Paco Martínez Soria en América, con la gallina en la caja. Algo así como Mr. Bean. A veces lo parezco, y no porque sea torpe que creo que no lo soy, pero hay cosas… Por ejemplo las maquinas de beber agua. Tienen un mecanismo para activarlas oculto sacado de la película de Indiana Jones. Y lo peor es que hay distintos mecanismos ocultos en cada maquina, así que cuando veo una y quiero beber me aseguro que no hay nadie al lado para que no me vea mirando como consigo hacer funcionar una maquina de beber agua. Los ascensores parecen puertas normales algunos, así que son difíciles de encontrar. Los lavabos públicos algunos se activan con sensores automáticos así que antes de usarlos tengo que mirar a alguien por si hay que pisar algún sitio. Y lo peor ha sido descubrir el mecanismo de la ducha. El mando tienes que girarlo en sentido contrario a las agujas del reloj, y solo hay uno. Asi que el primer día te cae el agua fría, hasta que lo averiguas. Hay algunas cosas más distintas. Por ejemplo la bebida. En muchos restaurantes pagas una bebida (pagas según el tamaño del vaso) y puedes levantarte y rellenarla cuantas veces quieras. Lo relleno y de reojo miro al camarero como si estuviera pendiente de mí. Y cuando vamos hablando en sitios públicos Juande me tiene qeu decir que baje la voz, porque aqui todos hablan muy bajo.